Médicos reconstruyen la cabeza de niño atacado por un perro

Cirujanos del IMSS realizaron una expansión de tejidos para cubrir el hueso del cráneo del niño, que quedó expuesto luego de ser mordido por un perro.

Escrito por: Fuerza Informativa Azteca
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| Crédito: Freepik

Cirujanos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Aguascalientes lograron reconstruir los tejidos de la cabeza de un niño de seis años que fue mordido por un perro, un caso que consideraron como uno de los más graves que hayan visto debido a las heridas que tenía el menor.

El pequeño necesitó de seis cirugías y un mes de hospitalización para recuperarse por completo, luego de ser llevado al área de urgencias del Hospital General de Zona (HGZ) número 3, para ser atendido por personal del IMSS.

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El niño llegó con heridas en la cabeza y el cuello, por lo que fue ingresado de inmediato al quirófano, donde médicos cirujanos pediatras hicieron una primera intervención; sin embargo, debido a la gran cantidad de hueso del cráneo que tenía expuesto, pasó al área de cirugía reconstructiva para que los especialistas lo operaran.

Mientras el pequeño estuvo en cirugía reconstructiva, recibió los aseos quirúrgicos correspondientes y los médicos colocaron sus tejidos en un mecanismo de cicatrización (sistema VAC) para conservarlos.

Médicos usaron expansión de tejido para cubrir el cráneo

Sobre este caso, Héctor Manuel Muñoz Muñoz, médico especialista en cirugía plástica, explicó que cuando el pequeño llegó al hospital el pronóstico era incierto, pero fue intervenido de inmediato para salvarlo.

“En un inicio el pronóstico del niño era incierto, porque no sabíamos si el perro que lo atacó tenía alguna enfermedad que causara alguna infección en las heridas”, detalló.

Afortunadamente, dijo, lograron reconstruir el área de las heridas con una expansión de tejido para cerrar el hueso expuesto, donde también se colocó piel sana con respuesta positiva por parte del menor.

“Siento una enorme satisfacción por los resultados obtenidos, pese a la complejidad del caso. Es uno de los más graves por mordida de perro que he visto, debido a la profundidad de las heridas. Como médico me puso a prueba y solo pensaba de qué manera ayudar al niño”, aseguró Héctor Manuel Muñoz.

El paciente se mantuvo bajo el cuidado de un equipo multidisciplinario integrado por especialistas, residentes, internos y enfermeros que trabajaron juntos para que tuviera una evolución favorable.

Después de ser dado de alta, el niño regresó a su casa y realiza sus actividades de manera cotidiana, ya que las heridas no dejaron ninguna secuela.

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