El cuidado de la piel es esencial para mantenerla saludable, radiante y protegida de los factores ambientales. Una rutina adecuada no solo previene el envejecimiento prematuro, sino que también mejora la textura y apariencia de la piel. Aquí te presentamos el secreto de un buen cuidado de la piel basado en las recomendaciones de dermatólogos.
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¿Qué hacer para lograr un buen cuidado de la piel?
Por su parte, Malvina Cunningham, quien es dermatóloga consultora de Skin + Me, enfatiza la constancia en el cuidado de la piel. Así que, mantener una rutina diaria, tanto por la mañana como por la noche, es clave para obtener los mejores resultados. Además, asegura que es un mito que la piel deje de responder a un ingrediente activo específico.
Una buena limpieza también es fundamental. Al respecto, la doctora Justine Hextall, asesora dermatológica, sugiere recurrir a productos limpiadores suaves e hidratantes para evitar una barrera cutánea debilitada. Si notas la piel extraña después de limpiarla, opta por un producto más suave que mantenga la misma hidratada y suave.
Durante el invierno, la dermatóloga Cristina Psomadakis aconseja no exfoliar en exceso para no debilitar la barrera cutánea. En su lugar, recomienda el uso de cremas de noche que ayuden a reparar y volver a hidratar la piel seca.
¿Qué aplicarte para un buen cuidado de la piel?
El retinol es un ingrediente popular en el cuidado de la piel. La doctora Alexis Granite sugiere aplicar una pequeña cantidad de retinol en noches alternas, seguido de un sérum o crema hidratante, y aumentar la frecuencia gradualmente según la tolerancia de la piel.
Los aceites esenciales pueden ser beneficiosos, pero el dermatólogo Dr. Thivi Maruthappu advierte que quienes tienen piel propensa a eczemas o alergias deben usarlos con precaución. Estos aceites pueden aportar una nutrición placentera a la rutina de cuidado de la piel si se usan adecuadamente.
Para pieles sensibles, la doctora Justine Hextall recomienda aplicar una crema hidratante en las zonas más delicadas antes de la ducha para protegerlas del agua y el champú. Después, utilizar una crema limpiadora suave para eliminar los restos de jabón o tensioactivos que puedan resecar la piel.
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