En fiesta permanente, Julio llena su casa de familiares, equipo y un sinfín de personajes cuya presencia parece tan inexplicable que pareciera que iban pasando y entraron. Miriam, acostumbrada a vivir en una casa solo para su familia, le crispa que ahora viva en lo que pareciera ser un hotel.
Julio va a casa de Amalia buscando a sus hijos, olvida por completo que los niños están en curso de verano, mientras tanto arregla algunos detalles de la casa haciéndole ver a Amalia que hace falta un hombre en esa casa. Amalia lo felicita por el embarazo de Miriam.
Días después, Julio, en actitud humilde y sobrio, por primera vez en mucho tiempo, regresa al gimnasio de Rómulo y le pide que lo entrene para “una última pelea”.
Blanca se siente estancada por lo que decide preparar un documental sobre la vida de Julio César Chávez, lo busca, él acepta sin saber bien de que se trata, le pide que se reúnan después. Miriam y Julio van al ginecólogo, descubren que serán padres de una niña.
Los medios presentan la pelea del siglo: Óscar de la Hoya vs Julio César Chávez. Ante las preguntas de la prensa, Julio se molesta y se va, es evidenciado que las apuestas están a favor de Óscar de la Hoya.
El dolor de perder a su gran amigo tumba al Campeón, sin embargo, invita a mucha gente a beber con él “por el Búfalo”.
La pelea llega y tanto Miriam como Amalia asisten al evento. Miriam, de seis meses de embarazo, intenta esconder los celos que le provoca ver a una despampanante Amalia, mientras ambas platican. Julio pierde contra Óscar de la Hoya. Solo y triste se ha enclaustrado en el PH, toma un revólver y se lo pone en la sien...
