Demon Slayer logró lo que pocas historias animadas: emocionar, romper récords y de paso dejar a medio fandom llorando en el cine. Su mezcla de acción brutal, estética impecable y drama familiar conectó con miles de personas.
Si al terminar la última temporada te quedaste con ese vacío que solo el anime deja, aquí hay buenas noticias: hay más películas japonesas que podrían flecharte igual o más.
¿Qué películas japonesas son recomendables para fans de Demon Slayer?
No todas tienen espadas con nombres poéticos ni demonios existencialistas, pero estas obras cinematográficas niponas tienen lo suyo: mundos intensos, personajes entrañables, visuales impactantes y ese saborcito emocional que engancha desde el primer minuto.
Aquí van los 7 animes que vale la pena ver:
- Mugen Train (obvio, pero se incluye porque es parte del canon y es una bomba emocional).
- Jujutsu Kaisen 0 – acción al por mayor, buenos personajes y una animación de lujo.
- Sword of the Stranger – una película con espadazos intensos, animación fluida y un protagonista que se hace querer.
- Ninja Scroll – clásico sangriento, crudo y con ese toque de fantasía oscura que engancha.
- Bleach: Hell Verse – para quienes aman los shinigamis y batallas al filo de la muerte.
- Princess Mononoke – no hay demonios como tal, pero sí criaturas, dioses y una narrativa que mezcla lo salvaje con lo humano.
- Dororo (2007) – menos conocida, pero poderosa, con un protagonista que pelea por recuperar su humanidad.
¿Qué tienen en común estas películas con Demon Slayer?
Todas comparten esa combinación de acción bien coreografiada, protagonistas con heridas profundas, y una narrativa que no le tiene miedo al dolor ni a lo espiritual.
Además, visualmente son una joya. Algunas son más modernas, otras más old school, pero todas tienen ese sello que hace que te claves y termines recomendándolas.
¿Dónde se pueden ver estas películas parecidas a Demon Slayer?
La mayoría están disponibles en plataformas de streaming, aunque algunas requieren renta o compra. Sword of the Stranger y Ninja Scroll, por ejemplo, suelen estar en catálogos de anime más específicos o en versiones físicas para fans hardcore.
Eso sí: si después de verlas terminas llorando o queriendo una katana decorativa, no digas que no se advirtió. Cada una de estas películas tiene su propio demonio que exorcizar (figurada o literalmente), y todas valen absolutamente la pena.
