A finales del año pasado, João Carlos Martins juntó a sus amigos en un conocido lugar de Sao Paulo, Brasil. Lo hizo con la intención de mostrarle un milagro tecnológico: unos guantes que lo harían volver a tocar con las dos manos, cosa que no hacía desde que tenía 52 años. Actualmente tiene 79 años.
Durante mucho tiempo fue uno de los mejores interpretes de Johann Sebastian Bach y el tiempo no le respetó como hubiera querido: en marzo del 2019 anunció su retiro luego de someterse a 24 cirugías, que sólo sirvieron para mermar el dolor de una enfermedad degenerativa. Esto lo orilló a trabajar sólo como director de nuevos talentos desde el 2000.
Te podría interesar: Gabriela Molina, una modelo sin brazos que busca romper los estereotipos de belleza; descubre su historia.
Habrá sido casualidad, destino o azar, pero en las épocas decembrinas del 2019 aquel bar fue testigo de como Carlos Martins interpretó piezas de sus admirados Frédéric Chopin, Wolfgang Amadeus Mozart y su amado Bach, el hombre al que conoce sin haberlo conocido por el simple hecho de leer sus partituras.
Antes de tener estos guantes –diseñados sólo para él– el pianista podía tocar despacio, con sus pulgares adoloridos y de una manera, quizá, torpe.
Después de perder mis herramientas, mis manos, y no poder tocar el piano, era como si hubiera un cadáver dentro de mi pecho
El historial médico de João Carlos Martins revela que en 1965 se dañó un nervio en el brazo, luego de haber jugado un partido de fútbol. Años después también sufrió un golpe en la cabeza con un poste de metal.
O maestro João Carlos Martins de 79 anos experimentou na semana passada um protótipo de luva que possibilitou o movimento de seus dedos para poder tocar piano de novo.#portallr1 #maestro #joaocarlosmartins #luvabionica #piano #instrumento #forcadevontade pic.twitter.com/BrzKVStnjj
— Lr1 | O Liberal Regional (@portalLr1) January 20, 2020
Las recuperaciones con el paso del tiempo se hacían mas riesgosas y costosas. La esperanza para que Martins volviera a tocar el piano eran difíciles y hubiera dejado de tocar las teclas que le daban vida de no ser por Ubiratã Bizarro Costa, quien diseñó los famosos guantes biónicos.
Las prendas están hechas de neopreno y tienen una estructura de fibra de carbono. Esto le ayuda a los dedos de João Carlos Martins elevarse luego de haber tocado cualquier tecla.
Hice los primeros modelos basándome en imágenes de sus manos, pero esos estaban lejos del ideal. Me acerqué al maestro al final de un concierto en mi ciudad de Sumaré, en la región de Sao Paulo. Pronto se dio cuenta de que no funcionarían, pero después me invitó a su casa para desarrollar el proyecto
Tanto Costa como Martins se encerraron en la casa del pianista, con el fin de conseguir un producto digno y funcional. Luego de estar semanas enclaustrados lograron crear los guantes, todo por el precio de 500 reales brasileños (2,250 pesos mexicanos, aproximadamente).
Finalmente, João Carlos Martins afirmó que en la última década había probado más de 100 dispositivos que le ayudarían a tocar de nuevo; no obstante, nada de eso funcionó.
Pero estos guantes sí. Incluso puedo ajustarlos. Eso no significa que esté todo resuelto. La atrofia muscular influye. En ocasiones intento tocar una rápida y me deprimo porque simplemente aún no sale
También te podría interesar:
Anabella Sciorra testificó en contra de Harvey Weinstein, acusando ataques sexuales en los años 90.