Miguel Gregorio Antonio Ignacio Hidalgo y Costilla Gallaga Mandarte y Villaseñor, mejor conocido como Miguel Hidalgo, no solo fungió como pieza clave en el “Grito de Independencia”, sino que también era identificado por sus secretos y pasiones, ¿cuáles eran?
La madrugada del 16 de septiembre de 1810, el “Padre de la Patria” encabezó el “Grito de Independencia” en Dolores, Hidalgo, Guanajuato, para llamar al pueblo de México a levantarse en armas en contra del Virreinato. Desde ese entonces, Miguel Hidalgo fue celebrado por dirigir militar y políticamente la primera parte del movimiento independentista.
Los vinos de Miguel Hidalgo: una de las pasiones ocultas del “Padre de la Patria”
Nuevo años antes de encabezar la Independencia de México, Miguel Hidalgo se encontraba radicando en la ciudad de Valladolid, Michoacán, donde se instruyó en latín, francés, filosofía, teología y literatura universal; sin embargo, tras la muerte de su hermano se trasladó a la ciudad de Dolores, Hidalgo para invertir sus ahorros en tres haciendas.
De acuerdo con algunos testimonios, el “Padre de la Patria” se distinguía por su gusto de las artes, la ideas, la música, la poesía, pero sobre todo el vino, del cual disfrutaba tanto que incluso fue uno de los pioneros en cultivar plantas de uva para la producción vinícola.
Miguel Hidalgo invirtió tanto en sus haciendas que incluso importó gusanos de seda, abejas para la producción de miel y levantó una fábrica de loza y ladrillos.

¡Un rebelde! La producción de vino se encontraba prohibida en México
Debido a que en aquel entonces la producción vino fuera de España estaba prohibido por afectar los intereses comerciales, el “Padre de la Patria” viajó la Ciudad de México para obtener una licencia real y continuar con la producción de la bebida.
Pese a que el permiso le fue negado, el líder del movimiento independentista continuó cultivando sus viñedos y olivos. La cosecha siguió durante varios años más, hasta que sus ideas en contra del gobierno español comenzaron a permanecer latente y el movimiento de Independencia fue descubierto.
Los viñedos de Miguel Hidalgo fueron destruidos y saqueados días después de que el cura encabezó el “Grito de Independencia”, por lo que hoy en día no quedan registros sobre la ubicación de las haciendas.