La madrugada de este miércoles más de 10 mil peregrinos de la Diócesis de Tenancingo, en el Estado de México, arribaron a la Basílica de Guadalupe, para seguir con una tradición que solo interrumpió la pandemia, para venerar a la Morena del Tepeyac.
Los peregrinos provenientes de diferentes municipios del Estado de México, llegaron el martes a la Ciudad de México (CDMX), a la alcaldía de Cuajimalpa, alrededor de las 13:00 horas, para descansar de su trayecto que realizan a pie, como una manda.
Peregrinos mexiquenses arribaron de madrugada a la Basílica
Tras descansar en ese punto, los peregrinos continuaron su camino entre las 20:00 y 21:00 horas del martes. Después reanudaron el camino: recorrieron avenida José María Castorena hacia la Carretera Federal México -Toluca, pasando por Constituyentes y Paseo de la Reforma, hasta llegar a calzada de Guadalupe y finalmente arribar alrededor de las 05:00 horas a la Basílica.
Entre música, flores y mucha alegría los peregrinos realizaron el recorrido sin ninguna incidencia.
Elementos de la Subsecretaria de Tránsito de la policía de la Ciudad de México resguardaron la peregrinación y realizaron cortes a la circulación.
Peregrinos de Diócesis de Tenancingo se unen por la fe
En su página de Internet la Diócesis de Tenancingo da a conocer la importancia de esta peregrinación en la que los devotos de la Virgen de Guadalupe se reúnen para viajar hacia el templo mariano en la Ciudad de México (CDMX).
“Para nuestra Diócesis de Tenancingo es ya una tradición realizar cada año la Peregrinación a la Basílica de Guadalupe. Un momento en que feligreses de toda la diócesis se reúnen para llevar a la morenita del Tepeyac sus peticiones y dar gracias por las bendiciones recibidas todo el año.
“Es un momento de celebración, es un ambiente de alegría, se camina cada día como si fuera una fiesta y todos acompañan los cantos con sus palmas. Asistir a la Basílica de Guadalupe es especial para todos los mexicanos que profesan la fe católica”, destacan las autoridades religiosas.
