Todo el mundo lo ha visto: esa bandejita metálica que se despliega en la parte trasera del carrito del súper y que, por generaciones, ha sido usada como asiento improvisado para niños inquietos. Entonces, ¿cuál es la verdadera utilidad del compartimento pequeño de los carros de supermercado?
Pero aunque esa función ya está grabada en el ADN de muchas familias, la realidad es que ese compartimento no fue diseñado exclusivamente para los más pequeños. Tiene otra utilidad menos conocida… pero muy práctica.
Te puede interesar:
- ¿Cuánto dinero gana Yeri Mua por hacer contenido? Ella misma lo reveló y sorprendió a todos
- Le preguntamos a la IA por qué nadie quiere a Ángela Aguilar y esto que respondió fue icónico
- La IA ya predijo quién de los participantes ganará la final de MasterChef Celebrity Generaciones
¿Para qué sirve realmente el compartimento pequeño del carrito de supermercado?
Aunque muchos lo asocian con la idea de “llevar al niño seguro mientras se hace la compra”, la verdadera intención del compartimento elevado era mucho más funcional: fue pensado para colocar productos delicados, como pan, frutas suaves o huevos.
Al estar separado del resto del espacio —donde usualmente van cosas pesadas como garrafas, latas o detergentes—, evita que los artículos frágiles terminen aplastados.
De hecho, varios supermercados en Europa ya lo promocionan como “zona de productos sensibles”. Aun así, el uso como asiento infantil se volvió tan común que nadie cuestionó mucho su origen.
¿Quién inventó el carrito y cómo surgió esta función?
El carrito de supermercado moderno es obra de Sylvan Nathan Goldman, un empresario de Oklahoma que en 1937 notó que la gente dejaba de comprar simplemente por no poder cargar más cosas. Su solución fue brillante: diseñó un carrito con ruedas, espacio profundo y una parte trasera plegable.
Con el tiempo, él mismo fue quien agregó el asiento para niños, viendo que muchas madres ya colocaban a sus hijos dentro del canasto. Así que el compartimento trasero evolucionó para ser doblemente útil: funcional para las compras y práctico para los adultos que van acompañados.
¿Por qué es importante saber la verdadera función de esta bandeja?
Porque a veces lo cotidiano tiene una lógica más interesante de lo que parece. Conocer para qué fue diseñada realmente esta parte del carrito ayuda a aprovecharla mejor y a repensar su uso según la necesidad.
Sí, puede seguir siendo el lugar ideal para sentar al peque con una bolsita de galletas, pero también es el espacio perfecto para poner el pan recién horneado sin que se deforme camino a casa.
El Capi te muestra lo que pasó con la Capiardera en un supermercado
Al final, ese pequeño detalle demuestra que incluso los objetos más simples del súper tienen una historia... y una razón más inteligente detrás.
