Los mexicanos que han preferido jugar con Estados Unidos

Vivimos en un mundo globalizado donde es fácil romper barreras y compartir nacionalidades. Aterrizado esa cuestión en al ámbito deportivo, específicamente en el futbol, esto implica el beneficio de poder representar a dos combinados. México y Estados Unidos son parte de esta dinámica debido a su cercanía territorial y política.

A eso se la agrega la gran rivalidad de ambas selecciones en los últimos tiempos, donde se han nivelado las distancias entre ambos. En ese sentido, los estadounidenses han aprovechado esa doble nacionalidad para convencer talento mexicano de jugar para su combinado.

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Esa fuga de talento puede deberse a varios factores: El más probable es que los directivos de la FMF no se han percatado de estos futbolistas para darles una oportunidad. Otra podría ser la competitividad en ciertas posiciones de la alineación titular (un ejemplo es lo que sucede actualmente con la Selección Azteca, en la que como Santiago Ormeño debe pelear el puesto de delantero con Jiménez, Macías, Pulido, Martín, para nombrar algunos).

Independientemente de la razón o decisión de jugar para alguna de los dos selecciones, estos son los casos más sonados de jugadores que han jugado para el vecino de norte:

Milita en el Wolfsburgo de la Bundesliga y ha estado cerca de debutar en el máximo circuito del futbol alemán. Estuvo en la brújula del futbol mexicano y al final se decantó por el otro bando.

Tiene ascendencia azteca pese a haber nacido en territorio estadounidense. Este podría ser una muestra de futbolista hecho en México (actualmente juega con los Pumas de la UNAM) que decidió probarse con los de la Unión Americana.

Castillo fue de los jugadores más sonados en cambiar de equipo. Nació en Las Cruces, Nuevo México pero jugó partidos amistosos con México en la era de Hugo Sánchez y Sven-Göran Eriksson. En 2009 tomó la decisión de jugar en el país donde nació pese a las críticas que eso conllevó. Fue el segundo futbolista en representar a ambos combinados de CONCACAF. Actualmente juega en el San José Earthquakes de la MLS, pese a pesar de forjarse en la Liga BBVA MX.

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Fue justamente el primero en fundarse en ambas playeras. De 1992 a 1993 vistió la playera de nuestro país y de 1996 a 1997 la de las barras y las estrellas. Cabe destacar que él influyó en la llegada de Castillo al equipo de EU, al ser gente cercana del entonces entrenador Jürgen Klinsmann. Actualmente trabaja como cazatalentos de la US Soccer.

Tuvo su época de gloria en con el bicampeón León de la Liga BBVA MX. Fue tomado en cuenta para la portería mexicana, pero lo peleado del puesto le hizo aceptar el llamado justamente de Klinsmann. Hoy Se juega con el Colorado Rapids en la parte final de su carrera.

“Benny” como también se le conoce, es nacido del otro lado del Río Bravo pero su padre es mexicano. Aunque fue llamado a la Selección Azteca Sub 23, fue la mayor del gran rival la que lo debutó en la mayor en 2012. Otro ejemplo de jugador hecho en el futbol local (con Tijuana, Veracruz, Dorados y América). Juega para el Austin FC.

Es el mismo caso de arriba. La diferencia es que en México sí lo descartaron totalmente y terminó por debutar del otro bando en 2008.

El llamado “Gringo” tiene algo especial. El que fuera mediocampista de Pachuca, Tigres y Puebla tuvo la posibilidad de disputar un Mundial (Sudáfrica 2010) con los Estados Unidos.

Otro con dobles raices que pudo asistir al Mundial de Sudáfrica 2010 vistiendo la playera estadounidense. En México tuo gran paso como jugador con Puebla, Pachuca, Tecos, Santos, Tijuana y Tigres, obteniendo el campeonato de goleo en el Bicentenario 2010.

Aquí jugó para Atlas y Pachuca pero nunca hubo el interés de llamarlo. También tuvo la dicha de disputar una Copa del Mundo con la playera blanca, azul y rojo, tras debutar en 2010. En la actualidad juega para el Toronto FC.