Rodeada de árboles, de fauna local y muy alejada del bullicio que tanto caracteriza a la Ciudad de México (CDMX), se encuentra la Isla de las Muñecas, un sitio muy buscado entre los turistas por las historias paranormales que alberga.
Al menos, eso es lo que cuenta Jesús Reyes Nava, extrabajador de la Isla de las Muñecas, quien ha vivido de cerca experiencias relacionadas con entes del más allá. Esto es lo que narró a las cámaras de Fuerza Informativa Azteca (FIA).
¿Cuál es la leyenda de la Isla de las Muñecas?
En 1950, Don Julián Santana encontró el cuerpo de una niña, estaba flotando en la orilla de su chinampa. El espíritu de esta pequeña lo espantaba y para ahuyentarlo, decidió colocar algunas muñecas que recogió en la basura y en los canales de Cuemanco.
Las autoridades de la CDMX hicieron el rescate ecoturístico de la isla en 1987, se encontraron con un lugar cubierto de lirio acuático, detalló la alcaldía Xochimilco en su página oficial.
Don Julián murió de un infarto en 2001, en el mismo lugar donde había encontrado el cadáver de la niña; llegó a recolectar más de dos mil 500 muñecas, pero actualmente en la isla hay más de seis mil.
Historias paranormales atraen a turistas a los canales de Xochimilco
Jesús, extrabajador de la Isla de las Muñecas, narró que de todas las figuras que Don Julián colocó, solamente a una le puso nombre: Agustina.
“Para él era como una hija (...) en las noches Agustina se la pasa jugando ahí con las demás, luego se ve hasta cómo sale de la casa caminando”, añadió.
De acuerdo con el relato de Jesús, esa no es la única experiencia paranormal que le tocó vivir, también afirmó que se escuchaban voces y el llanto de una niña, e incluso llegó a ver sombras.