La Fiscalía General de la República (FGR) investiga a la empresa texana IKON Midstream, con sede en Houston, como parte de una red internacional de contrabando de combustible que habría ingresado de forma ilegal millones de litros de diésel a México desde Canadá.

De acuerdo con el expediente de la FGR, la compañía está implicada en al menos seis envíos marítimos de hidrocarburos que fueron declarados falsamente como “lubricantes”, con el aval de funcionarios del gobierno federal mexicano. El combustible fue adquirido originalmente en Canadá a la firma Imperial Oil, y posteriormente transportado en buques hacia puertos mexicanos como Tampico, Ensenada y Guaymas.

¿Cómo operaba la red de contrabando en Texas?

El documento judicial detalla que IKON Midstream operó desde el puerto de Tampico, Tamaulipas, donde en abril de 2024 ingresó más de 6 millones de litros de hidrocarburo a bordo del buque de bandera liberiana Clearocean Mustang.

Este caso se suma al del barco Torm Agnes, de bandera danesa, que en marzo de 2024 descargó diésel en Baja California y Sonora. Según una investigación de Reuters, el navío zarpó de la terminal marítima de Vancouver, Canadá, el 2 de marzo, cargando 120 mil barriles de combustible.

Sin embargo, los documentos de importación indicaban que el producto era “lubricante industrial”, con una factura emitida por IKON Midstream por 1.3 millones de dólares, apenas una décima parte del valor real del diésel transportado.

Los buques, las pipas y el hilo que lleva a México

Después de su primera descarga en Ensenada, el Torm Agnes dejó más combustible en Guaymas, Sonora, el 20 de marzo. Testimonios y registros señalan que decenas de pipas de la empresa Mefra Fletes retiraron el diésel del puerto. La misma compañía fue señalada meses antes, tras el aseguramiento de 10 millones de litros de combustible en Tampico.

Los investigadores mexicanos sostienen que IKON Midstream sería una pieza clave en este negocio ilegal millonario que conecta a Canadá, Estados Unidos y México. El combustible contrabandeado habría ingresado al país evadiendo impuestos y controles aduaneros, generando pérdidas millonarias al erario.

IKON Midstream y su director, bajo la lupa

El director ejecutivo de IKON Midstream, Rhett Kenagy, también está bajo investigación. Hasta ahora, ni él ni la empresa han emitido declaraciones sobre su presunta participación en esta red trasnacional, conocida ya como “el robo del siglo” dentro del sector energético.

Las autoridades mexicanas buscan ahora determinar el grado de participación de funcionarios federales que habrían validado los documentos falsos que permitieron el ingreso de los buques.