A pesar de los intentos por censurar a la senadora panista Lilly Téllez, se difundió una serie de videos que muestran un presunto esquema de corrupción encabezado por Adán Augusto López Hernández, coordinador de Morena en el Senado.

Estas grabaciones muestran las presuntas irregularidades, que llegan a las más altas esferas del poder en México, con contratos millonarios adjudicados a empresas vinculadas a sus prestanombres.

¿Cuál es el modus operandi de Adán Augusto López?

La denuncia de la senadora indica que Adán Augusto, desde su posición de poder en la gubernatura de Tabasco, y después en la Secretaría de Gobernación, habría desarrollado un esquema de corrupción que incluye lavado de dinero, defraudación fiscal y enriquecimiento ilícito.

En los videos presentados, se describe el modus operandi, que se basa en conectar a empresarios y prestanombres con contratos gubernamentales.

Los principales involucrados serían Fernando y Carlo Padilla, quienes según la denuncia, actúan como prestanombres de López Hernández.

De esta manera, las empresas “fantasmas” habrían generado ganancias que superarían los mil 600 millones de pesos, tanto en México como en Estados Unidos.

Principales empresas vinculadas a la red de corrupción

Según los videos, el mecanismo es relativamente sencillo pero efectivo. Adán Augusto mantiene contacto directo con clientes y socios potenciales.

Fernando Padilla, director general del Grupo Cocei, se encarga de los contratos, mientras que Carlo Padilla, director de relaciones públicas, maneja la operación diaria. Parte del dinero de los contratos se destina a proveedores, otra parte a sobornos y otra vuelve al bolsillo del senador.

Entre las compañías mencionadas en las grabaciones están:

  • F Medical: que proporciona unidades médicas móviles a gobiernos y candidatos
  • Aspen Construcciones: considerada una de las constructoras favoritas de la 4T.

Según la denuncia, estas empresas reciben contratos privilegiados para realizar obras y servicios a nivel federal y estatal.

Hasta ahora, el coordinador de Morena en el Senado no ha dado ninguna declaración sobre estas denuncias, por lo que su silencio ha sido interpretado por algunos como un reflejo de la impunidad que protege a aquellos que juraron ser diferentes.