No todo se ve en las calificaciones o en cómo hace la tarea. A veces, lo que tu hijo dice refleja mucho más: cómo entiende sus emociones y las de los demás. Estas cuatro frases son pistas claras de que tiene inteligencia emocional.
Si tu hijo suelta alguna de estas frases, quiere decir que ya está entendiendo lo que siente y también lo que sienten los demás, y que sabe cómo reaccionar sin armar un drama.
Estas frases no son reglas, pero sí señales de que está aprendiendo a manejar sus emociones y ponerse en los zapatos de otros, algo que los expertos del Centro de Investigación en Psicología Infantil destacan como fundamental para su desarrollo social.
Antes de leerlas, recuerda: cada niño tiene su ritmo:
- “Lo siento, no era mi intención”: Pedir disculpas de corazón muestra empatía y responsabilidad. La Sociedad Mexicana de Psicología Infantil señala que esta habilidad ayuda a construir relaciones más fuertes y confianza en sí mismo.
- “¿Cómo te sientes?”: Si pregunta esto, está practicando empatía de manera natural. La UNAM explica que los niños que se interesan por los sentimientos ajenos desarrollan habilidades sociales más sólidas y aprenden a resolver conflictos sin pelear.
- “Estoy frustrado, necesito un momento”: Reconocer la frustración y pedir tiempo para calmarse demuestra autocontrol. Daniel Goleman dice que esta habilidad es clave para que los niños tomen mejores decisiones y manejen emociones difíciles.
- “Me alegra que lo hayas logrado”: Celebrar los logros de otros sin celos refleja gratitud y empatía. Según el Journal of Emotional and Behavioral Disorders, los niños que hacen esto construyen relaciones más saludables y cooperativas.

No todos los niños lo hacen igual, pero cuando escuchas estas palabras, es una señal de que está aprendiendo a conocer sus emociones, a empatizar y a llevarse mejor con todos desde pequeño.
Qué es la inteligencia emocional sin complicaciones
La inteligencia emocional no es solo controlar berrinches o enojos. Es entender lo que sentimos y lo que sienten los demás, empatizar y reaccionar de manera calmada.
Los niños que practican esto desde pequeños aprenden a relacionarse mejor, a manejar sus emociones y a comunicarse sin dramas. Daniel Goleman destaca que estos niños suelen tener más seguridad y relaciones más sanas con amigos y familia.

Cómo fomentar la inteligencia emocional en casa
- Habla de emociones todos los días: “yo estoy contenta porque…”, “yo me siento triste cuando…”.
- Valida lo que sienten, aunque te parezca algo pequeño.
- Da ejemplo: ellos aprenden viendo cómo tú manejas tus sentimientos.
- Refuerza empatía y gratitud: celebra cuando dicen o hacen algo bonito por otros.