En La Granja VIP nunca faltan las sorpresas, pero esta vez se vivió un momento que combinó tensión, risas y un riesgo capilar inesperado. Todo comenzó con un simple “retoque” que El Patrón pidió a Alfredo Adame, ya que había hecho un buen trabajo con la máquina rasuradora… pero terminó en algo muy distinto.
¿Por qué El Patrón dejó que Alfredo Adame le cortara el cabello?
En medio de la convivencia, Alfredo Adame manejaba la máquina de cortar cabello y, entre bromas, El Patrón se animó a dejarle su peinado en manos del actor. Aunque su petición fue que le cortara solo “un poquito”, los presentes sabían que las cosas podían salirse de control… y así fue.
Desde que se sentó, El Patrón expresó sus dudas y pidió testigos por si algo salía mal. Mientras Adame encendía la máquina, los granjeros se divertían anticipando un desastre, y aunque el corte no fue tan radical como esperaban, El Patrón empezó a sospechar que algo no iba bien, de hecho le pidió a Omahi que tomara una mancuerna del gimnasio para que, en caso de que viera que lo rapaban, se la aventara a Adame para detenerlo. Entre risas, amenazas y gritos, el ambiente se volvió una mezcla de nervios y diversión.
¿Cómo quedó El Patrón tras el corte de Alfredo Adame?
Aunque al principio pareció que no había problema, bastó con que El Patrón se viera al espejo para soltar un grito. Su reacción fue inmediata, pues se sintió traicionado y no dudó en soltarle un buen reclamo a Alfredo Adame. Según él, el resultado fue desastroso y hasta se le ofreció un sombrero para cubrirse la cabeza.
Algunos granjeros bromeaban con que había sido porque necesitaba ventilación en la mollera o que solo le tomaría un par de años recuperar su cabello. Mientras tanto, Adame defendía su trabajo al asegurar que lo había dejado espectacular y que solo le quitó volumen.
El momento, además de divertido, dejó claro que en La Granja VIP cualquier situación puede volverse inolvidable. Lo que empezó como una broma entre compañeros terminó en una escena épica con El Patrón enfrentando las consecuencias de confiar su cabello a Alfredo Adame. ¿Te atreverías tú?