Tras un periodo de sequía y preocupación, los habitantes de Valle de Bravo no solo han encontrado la tranquilidad, sino también una renovada prosperidad. La emblemática presa Miguel Alemán ha recuperado su majestuosidad, demostrando la fuerza restauradora de la naturaleza y el resurgimiento de este popular pueblo mágico.

La presa Miguel Alemán en Valle de Bravo alcanza más del 90% de su capacidad tras intensas lluvias

Hace apenas cuatro meses, la zona ribereña que hoy se desliza sobre el agua era utilizada como área de aparcamiento debido a los bajos niveles. Sin embargo, gracias a la reciente temporada de precipitaciones, el embalse Miguel Alemán Velasco ha alcanzado casi la totalidad de su capacidad, superando el 90%. Este aumento ha reactivado de inmediato la actividad turística de la región, permitiendo la reanudación de los paseos en lancha y fomentando el flujo de visitantes.

Los lugareños y turistas expresan su satisfacción por el cambio. Observar la recuperación del cuerpo de agua, que por años se había mantenido con niveles mínimos, resulta sumamente gratificante para la comunidad. Actualmente, el nivel del agua se sitúa en un impresionante 97%, almacenando más de 400 millones de metros cúbicos.

La nueva perspectiva del agua también ha cambiado el paisaje. La orilla ha subido hasta el punto de que estructuras icónicas como las bases de las figuras del Cristo Negro y la Virgen María, que se encuentran asentadas sobre una roca de ocho metros, ahora se aprecian al nivel del agua, un contraste notable con el año pasado, cuando se las veía desde lo alto.

El resurgimiento de la actividad turística ha aumentado las ganancias de comerciantes locales

Durante un lustro, el nivel de esta presa llegó a descender hasta un crítico 28%. Este periodo se caracterizó por el cierre de numerosos negocios, la inoperatividad de los muelles y la drástica caída en la afluencia turística.

La restauración del embalse ha traído consigo una bonanza económica. Los muelles y los establecimientos de comida y bebida aledaños al cuerpo de agua han experimentado un incremento en sus ganancias de hasta un 70%. Los comerciantes reportan el regreso de su clientela y una importante afluencia de visitantes, lo que ha generado una sólida mejoría financiera en la zona.

La recuperación de Valle de Bravo es parte de un éxito más amplio a nivel regional. Otras presas clave, como Villa Victoria y El Bosque, también han alcanzado cotas históricas. En conjunto, estos cuerpos de agua son vitales para el funcionamiento del sistema Cutzamala, una infraestructura esencial que proporciona suministro hídrico a aproximadamente cinco millones de habitantes en el Valle de México.