La tensión en Medio Oriente ha alcanzado un nuevo punto crítico. El gobierno de Israel confirmó el inicio de una ofensiva terrestre para ocupar toda la Franja de Gaza, tras casi dos años de ataques aéreos y bombardeos que devastaron al enclave palestino.

Netanyahu anuncia el “golpe final” Gaza

El primer ministro Benjamin Netanyahu declaró: Vine a aprobar los planes de las Fuerzas de Defensa de Israel para tomar el control de la ciudad de Gaza y derrotar a Hamás. Al mismo tiempo, ordené iniciar negociaciones inmediatas para la liberación de todos nuestros rehenes”.

Con este anuncio, Israel formalizó la invasión que busca desmantelar por completo a Hamás y abrir un nuevo frente de negociaciones. Sin embargo, la decisión también ha provocado un nuevo éxodo palestino, con miles de personas huyendo de sus hogares ante el avance de las tropas.

El costo humanitario de la guerra

Un desplazado palestino relató: “Lo que me hizo salir fue el hambre, el asedio, la guerra, los cohetes que caían sobre nosotros y los drones bombardeando toda la noche. Testimonios como este reflejan la desesperación de quienes se ven forzados a abandonar lo poco que les queda.

La preocupación no solo viene de las autoridades locales. Philippe Lazzarini, comisionado general de la Agencia de la ONU para Refugiados Palestinos, advirtió: Tenemos una población extremadamente débil que se enfrentará a una nueva gran operación militar. Creíamos que ya lo habíamos dicho todo sobre Gaza, que la habíamos descrito como un infierno en la Tierra muchos simplemente no tendrán la fuerza para afrontar un nuevo desplazamiento”.

La condena internacional y el riesgo regional

La comunidad internacional ha pedido un alto al fuego inmediato, pero hasta el momento sus exigencias no han detenido los preparativos militares. Las imágenes de destrucción y el creciente número de víctimas mantienen la atención global sobre la guerra, mientras aumentan los temores de una escalada hacia otros territorios del Medio Oriente.

Preparativos militares en marcha en Gaza

De acuerdo con fuentes oficiales, 60 mil reservistas israelíes ya fueron movilizados para la gran operación. Si no ocurre un hecho extraordinario que frene la estrategia, la incursión a gran escala sobre la Franja de Gaza comenzará en un plazo máximo de 15 días.

Israel busca no solo una victoria militar contra Hamás, sino también redefinir la correlación de fuerzas en la región. No obstante, los desplazamientos masivos, el colapso humanitario y la presión internacional marcan el desarrollo de lo que ya se considera uno de los momentos más decisivos de este prolongado conflicto.