Robert Phillip Hanssen, el exagente del FBI convertido en espía a quien la agencia federal describe como el más dañino en su historia, fue encontrado muerto en su celda de una prisión de máxima seguridad en Colorado el lunes 5 de junio, dijeron las autoridades estadounidenses.
Hanssen cumplía cadena perpetua en ADX Florence, un centro de máxima seguridad en Colorado al momento de su muerte. Se alega que el espía vendió secretos a Rusia a cambio de más de un millón de dólares estadounidenses y diamantes.
Hanssen, de 79 años, fue sentenciado en 2002 a cadena perpetua en ADX Florence después de declararse culpable de espiar para la Unión Soviética y luego para Rusia durante más de 16 años.
El personal penitenciario tomó medidas para intentar salvar la vida de Hanssen después de ser encontrardo inconsciente el lunes por la mañana, pero no tuvo éxito, dijo la Oficina de Prisiones en un comunicado. No proporcionó la causa de muerte del espía.
BREAKING: I just heard that the FBI's most damaging spy Robert Hanssen, code name: Gray Day, passed away in his jail cell today. This closes the door on a huge moment in my life. I had hoped to confront him one last time, face to face. pic.twitter.com/4GtcEWEOMO
— Eric O'Neill (@eoneill) June 5, 2023
Robert Hanssen, el espía dentro del FBI
Hanssen se unió al FBI en 1976 y comenzó a vender información clasificada a la Unión Soviética en 1985, según el sitio web del FBI. Al momento del arresto del espía en 2001, había sido compensado con más de $1.4 millones en efectivo, fondos bancarios relojes y diamantes, a cambio de comprometer numerosas fuentes humanas, técnicas de inteligencia y documentos clasificados de Estados Unidos, dice el sitio web del FBI.
Los investigadores del FBI trabajaron durante años para tratar de identificar al espía en sus filas. Según el FBI, en las semanas previas a su arresto en febrero de 2001, unas 300 personas trabajaban en la investigación y controlaban a Hanssen. Un equipo de arresto detuvo a Hanssen después de atraparlo haciendo un “cajón sin salida” de materiales clasificados en un parque en los suburbios de Virginia, dice el FBI.
