Cuando somos niños, es muy común perder los dientes, debido a que estamos en periodo formativo y los dientes temporales, o “de leche” caen durante la infancia para dejar lugar a los dientes definitivos.
Sin embargo, en general los adultos también pueden perder algunas piezas dentales, aunque no por las mismas razones. ¿Por qué puede pasar esto?
- Golpes
Al caer al piso o golpearse con algún objeto contundente, las personas pueden perder uno o varios dientes. En ocasiones puede pasar por realizar actividades deportivas de contacto, como hockey o futbol americano, entre otros.
- Enfermedades bucales graves
Si no se tiene una adecuada higiene bucal, las personas pueden desarrollar enfermedades graves como la periodontitis, la cual es una inflamación e infección, de ligamentos y huesos que soportan los dientes, destaca la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Este padecimiento puede llevar a una gingivitis, es decir, inflamación de las encías. Cuando los dientes pierden soporte, estos terminan por aflojarse y caerse. La misma dependencia de la Unión Americana destaca que esta es la causa principal para la caída de los dientes en los adultos.
- Bruxismo
Esta es una enfermedad cuando una persona rechina, aprieta o cruje los dientes, ya sea cuando está despierta o dormida. La mayoría de estos casos son leves y no requieren tratamiento, pero en casos graves, puede llevar a aplanar los dientes, partirlos o dejarlos flojos.
- Caries
Las caries son daños en la superficie o el esmalte de los dientes, debido a que las bacterias localizadas en la boca generan ácido que daña las piezas dentales y provocan huecos en ellas.
En caso de que las caries no sean tratadas correctamente por un dentista, pueden generar dolor, infecciones y hasta la pérdida de los dientes.
¿Cómo cuidar los dientes?
Para que las personas adultas no pierdan los dientes, es necesario tener una buena higiene bucal, con recomendaciones como las emitidas por el Instituto Nacional de Investigación Dental y Craneofacial de Estados Unidos:
- Cepillarse los dientes al menos dos veces al día con una pasta dental con flúor.
- Usar hilo dental.
- Evitar alimentos y bebidas con altos contenidos de azúcar.
- No fumar tabaco ni usar vapeadores.
- Visitar al dentista de forma frecuente para revisiones y limpieza profesional.
