"¿En qué momento dejar a los niños y adolescentes solos se volvió de alto riesgo en México?”. Esta es la pregunta que se hacen millones de padres de familia, paralizados por el miedo del homicidio, uno que ya no distingue edades. La libertad de jugar en la calle se ha perdido, reemplazada por una angustia constante.
“Mucha gente se dedica al secuestro, se roban a los niños”, lamenta Jerónimo, padre de familia. “Siempre hay el miedo de que no regresen o de que haya alguien que se los quiera llevar”, secunda Susana, madre.
No es una paranoia. En el México de la violencia creciente, este temor se fundamenta en las siguientes estadísticas brutales:
¿Cuántos niños han muerto en México en el último año?
La violencia contra la infancia ha alcanzado niveles de crisis de salud pública. Según datos reconocidos por la propia Secretaría de Salud en el primer informe de gobierno federal, el homicidio es ya la quinta causa de muerte en México en la edad escolar (de 5 a 14 años).
Por su parte, la Red por los Derechos de la Infancia (REDIM) destacó en su reporte más reciente que mil 338 personas de entre cero y 17 años murieron por agresiones tan solo durante el año 2024.
“Los chavos ahora no tienen esa libertad, porque si sales no sabes si los va a matar una bala perdida, si los van a levantar, si se los van a llevar para trata”, explica la abogada y activista Diana Cruz.

Un “cóctel de impunidad” y abandono a los niños en México
Para los expertos, esta tragedia se alimenta de un “cóctel de impunidad” y de una indiferencia total por parte del Estado. La probabilidad de que un crimen contra un menor sea castigado es casi nula.
“Necesitamos reducir la impunidad. De cada 100 delitos donde niños y niñas son víctimas, lamentablemente solo 5 o 3 en ocasiones [llegan a] sentencias de cada 100 carpetas de investigación”, denuncia Juan Martín Pérez, Coordinador de Tejiendo Redes Infancia.
Pérez también señala una “gran deuda” del Estado, acusando un desmantelamiento de las instituciones de protección. Asegura que en los seis años de gobierno de López Obrador, el presidente “se negó a sesionar con el Sistema Nacional de Protección Integral (SIPINNA)".
La situación, denuncia, no ha cambiado con la nueva administración: “Lleva ya un año la presidenta y por mandato de ley, tendría que haber sesionado ya al menos dos veces y no lo ha hecho”.

“Con los niños no": El lema que nadie respeta
En un país donde la delincuencia “agarra parejo”, la frase “con los niños no” se ha convertido en un eslogan vacío. “Ojalá y lo entendieran, con los niños no, de ninguna manera”, reclama la activista Diana Cruz.
Mientras tanto, la libertad de miles de niños y adolescentes sigue perdida, demostrando que no solo son el futuro, sino un presente vulnerable que está siendo masacrado.