Un satélite “muertos”, considerado inactivo desde hace décadas, captó la atención de la comunidad científica al emitir una misteriosa y extremadamente potente ráfaga de radio.
Un satélite inactivo emitió una potente ráfaga de radio
Este extraño suceso ocurrió el 13 de junio de 2023, cuando un equipo del Dr. Clancy James, de la Universidad de Curtin en Australia, estaba explorando el universo con sus 36 radiotelescopios del Australian Square Kilometre Array Pathfinder (ASKAP).
Detectaron esta señal enigmática y, al principio, pensaron que habían encontrado algo increíble en el espacio profundo, ¡quizás hasta un nuevo púlsar!
Last year, astronomers detected a powerful burst of radio waves from within our galaxy. Researchers now say it came from NASA's defunct Relay 2 satellite — but they're not sure what caused it. https://t.co/6O9McoYT1L
— Live Science (@LiveScience) June 25, 2025
La señal fue detectada a menos de 20 mil kilómetros de la Tierra
Pero al investigar más a fondo, se llevaron una sorpresa: la señal estaba tan cerca de la Tierra que los telescopios no podían enfocarla bien, como cuando tu celular no enfoca algo muy próximo. Esto confirmó que venía de algún lugar a menos de 20 mil kilómetros de nuestro planeta, descartando que fuera algo muy lejano en el cosmos.
Lo más impresionante fue lo rápido e intenso que fue el pulso: duró menos de 30 nanosegundos, pero en ese instante fugaz, fue tan fuerte que “eclipsó por completo todo lo demás en el cielo”, según el Dr. James. Una verdadera explosión de energía inesperada de un objeto que se creía olvidado.
Posibles explicaciones incluyen descargas eléctricas o explosiones de energía por micrometeoroides
Aunque los científicos lograron ubicar de dónde venía la señal, rastreándola hasta la cercanía del viejo satélite Relay 2, y vieron que la señal viajó a través de la atmósfera de una forma esperada, la gran pregunta sigue siendo: ¿este satélite, que no funcionaba desde hace décadas, cobró vida de nuevo? Los investigadores creen que hay explicaciones más probables para esta misteriosa ráfaga.
Podría ser una especie de descarga eléctrica (como la estática) o una explosión de energía causada por el golpe de una partícula muy pequeña del espacio (un micrometeoroide).
Aunque ya se habían visto descargas eléctricas con otros telescopios, esta fue mil veces más rápida. Esta nueva detección no solo nos da formas nuevas de detectarlas, que son un peligro serio para las naves espaciales, sino que también crea una nueva fuente de señales confusas que los astrónomos tendrán que tener en cuenta cuando busquen fenómenos en el espacio.