Que tu internet vaya lento no siempre es culpa del proveedor. A veces, sin que te des cuenta, hay alguien más navegando desde tu red. Y no hablamos de tus dispositivos conectados, sino de un intruso: un vecino, una persona cercana… alguien que se colgó de tu WiFi sin pedir permiso.
Esto no solo puede hacer que tu señal falle, también representa un riesgo para tu privacidad. Por eso es tan importante saber cómo identificar a los colados y lo más importante: cómo sacarlos de tu red para siempre.
¿Cómo detectar si alguien más está conectado a tu red WiFi?
Una pista clara de que alguien te está robando WiFi es que tu conexión se vuelve inusualmente lenta, incluso si nadie en casa está viendo series o descargando archivos pesados. Si apagas todos tus dispositivos y el módem sigue parpadeando como si estuviera trabajando, es una señal de alerta.
Una herramienta muy práctica es Fing, una app gratuita que puedes descargar en tu celular. Te muestra qué dispositivos están conectados a tu red, con todo y marcas, modelos y dirección MAC. Varios especialistas en seguridad, como los de Kaspersky, la recomiendan porque es fácil de usar y te da claridad sin tener que entrar al módem.

Otra opción es revisar directamente desde tu navegador. Si escribes la dirección 192.168.1.1 (o 192.168.0.1), podrás ingresar a la configuración de tu módem. Ahí hay una lista con todos los aparatos conectados. Si ves alguno que no reconoces, bingo: alguien está robando tu señal.
Paso a paso: cómo sacar al intruso de tu WiFi sin ayuda técnica
- Ingresa a tu módem.
Abre tu navegador y escribe la IP del equipo (la más común es 192.168.1.1). Inicia sesión con el usuario y contraseña del proveedor. Si no los sabes, vienen en una etiqueta pegada al módem. - Revisa los dispositivos conectados.
Busca una sección llamada “Clientes”, “Red local” o “Lista de dispositivos”. Ahí verás todos los aparatos conectados en ese momento. Identifica los que sí son tuyos (celulares, TV, consola…) y descarta lo que no reconozcas. - Bloquea al que no pertenece.
Algunos módems permiten hacerlo con un solo clic. En otros casos, puedes copiar la dirección MAC del aparato ajeno y agregarla a una lista negra desde el panel de configuración. - Cambia la contraseña del WiFi.
Es el paso más importante. Elige una nueva clave segura, que combine letras, números y símbolos. Nada de “casa123” o “internet2024”. Piensa en algo que solo tú sepas y que combine varias letras y números. - Reinicia el equipo.
Una vez hecho todo, apaga el módem y vuelve a encenderlo. Solo podrán conectarse quienes tengan la nueva contraseña.

¿Qué hacer para que nadie vuelva a robarse de tu red WiFi?
Esto es clave. Sacar al intruso es solo la mitad del trabajo. La otra mitad es blindar tu señal para que no vuelva a pasar. Especialistas en seguridad digital como los de NordVPN y TP-Link recomiendan lo siguiente:
- Cambia el nombre de tu red (SSID). Evita usar tu nombre o dirección. Usa algo neutro o incluso confuso.
- Desactiva el WPS. Es ese botón que a veces facilita las conexiones rápidas, pero también deja una puerta abierta para que cualquiera entre.
- Actualiza el firmware del módem. Muchos no lo hacen nunca, pero es vital: esas actualizaciones corrigen fallos que los hackers aprovechan.
- Crea una red solo para invitados. Así no compartes tu clave personal y puedes desconectarla cuando quieras.
- Haz una revisión cada tanto. Una vez al mes, entra a tu panel, revisa qué hay conectado y si algo no te suena… haz limpieza.