¡Una hora más de sueño! Con la Ley de Husos Horarios, el horario de verano se eliminó en gran parte de México, por lo que serán pocos los municipios que deben atrasar sus relojes este 2025 para dar inicio al invierno.
Fecha en que inicia el horario de invierno 2025 en México
El cambio de horario se llevará a cabo el próximo domingo 2 de noviembre, cuando los relojes se atrasen una hora a partir de las 2:00 de la mañana.
Este ajuste forma parte del horario estacional fronterizo norte, que, según el artículo 5 de la Ley de Husos Horarios, concluye el primer domingo de noviembre.
¿Por qué no todos los estados modifican la hora? Esto se debe a que, desde 2022, algunos municipios del norte de México decidieron sincronizarse con el horario de Estados Unidos para facilitar el intercambio comercial o por cuestiones de seguridad, ya que en verano suele oscurecer más tarde.
Municipios que aplican el cambio de horario de invierno en 2025
Actualmente, solo algunos estados y municipios fronterizos deben realizar el ajuste, incluyendo:
- Baja California: Todo el estado
- Chihuahua: Coyame del Sotol, Ojinaga, Manuel Benavides, Janos, Ascensión, Juárez, Praxedis G. Guerrero, Guadalupe
- Coahuila: Acuña, Allende, Guerrero, Hidalgo, Jiménez, Morelos, Nava, Ocampo, Piedras Negras, Villa Unión, Zaragoza
- Nuevo León: Anáhuac
- Tamaulipas: Nuevo Laredo, Guerrero, Mier, Miguel Alemán, Camargo, Gustavo Díaz Ordaz, Reynosa, Río Bravo, Valle Hermoso, Matamoros
Estados como Sonora y Quintana Roo no participan en el cambio estacional. Es decir, mantienen su horario fijo por conveniencia comercial y para favorecer el turismo.
Zonas horarias en México: mapa tras la eliminación del Horario de Verano
Actualmente, México opera con horario fijo todo el año, dividido en cuatro zonas principales:
- Zona Pacífico (UTC -8): Noroeste, incluyendo Baja California
- Zona Montaña (UTC -7): Sonora y partes de Chihuahua.
- Zona Centro (UTC -6): La mayoría de estados, incluyendo la CDMX
- Zona Sureste (UTC -5): Quintana Roo
¡Recuerda! Expertos aseguran que modificar el reloj puede tener efectos temporales en la salud, como alteraciones en el sueño, fatiga, irritabilidad y cambios en el rendimiento diario.
Por ello se recomienda adaptar los horarios de sueño unos días antes y mantener rutinas constantes para contrarrestar los efectos.