El Parlamento de Corea del Sur aprobó una ley que busca prohibir el consumo y la venta de carne de perro, una práctica realizada desde hace varios años y que aún es seguida en otras naciones en el continente asíático.
Este proyecto restringe la cría, distribución y venta de alimentos elaborados o procesados con ingredientes caninos, mencionó la comisión de la Asamblea Nacional de dicha nación.
¿Cuáles son las multas por vender carne de perro en Corea del Sur?
De acuerdo con la nueva ley, la persona que quite la vida a un perro para consumir su carne podrá ser castigada con tres años en prisión o una multa de 30 millones de won, poco más de 388 mil pesos mexicanos.
De la misma forma, habrá sanciones para quienes críen o vendan carne de perro para consumo humano, como 2 años de prisión o una multa de aproximadamente 20 millones de won, alrededor de 260 mil pesos mexicanos.
La legislación contempla un periodo de gracia de tres años para que los comerciantes de este producto puedan cerrar o cambiar de giro, además de recibir ayuda gubernamental para hacer la transición.
Esta ley aún debe pasar por el presidente Yoon Suk Yeol para su aprobación final. La iniciativa ha tenido apoyo del partido del mandatario, así como de la oposición y hasta de la primera dama Kim Keon Hee, quien cuida de cinco gatos y seis perros.
Hasta un millón de perros son criados y sacrificados cada año en Corea del Sur para consumo humano, asegura la organización de derechos de animales Humane Society International. En contraste, la organización señala que hay 6 millones de perros como mascotas en los hogares coreanos. Además, una encuesta de la firma Nielsen Korea muestra que el 86% de los surcoreanos no comerían carne de perro y el 57% apoyaría una prohibición.
¿Por qué consumen carne de perro en Corea del Sur?
Comer carne de perro en Corea del Sur es una práctica antigua en la cual las personas lo hacían para combatir el calor del verano. Actualmente, sólo los habitantes de mayor edad son quienes siguen con esta tradición, debido a las preocupaciones por crueldad animal y la tenencia de estos animales como mascotas por la población más joven.
En 2008, el país asiático intentó clasificar a los perros como ganado, lo cual generó críticas y el rechazo de activistas por los derechos animales, ya que consideraban que ello podía legalizar el comercio de carne canina, el cual hasta entonces no estaba regulado ni prohibido de forma expresa.
Países como China, India, Vietnam, Filipinas, Camboya e Indonesia aún tienen permitido el consumo y venta de carne de caninos. De hecho, en Yunin, al sur de China, desde 2009 realizan de forma anual el festival de la carne de perro. Taiwán fue la primera nación asiática en prohibir esta práctica en 2017.